El Pensamiento sistémico aparece formalmente hace aproximadamente 45 años, a partir de los cuestionamientos que hizo Ludwing Von Bertalanffy sobre la aplicación del método científico en los problemas de la Biología, debido a que éste se basaba en una visión mecanicista y causal, que lo hacía débil como esquema para la explicación de los grandes problemas que se dan en los sistemas vivos.
Este cuestionamiento le llevó a plantear una reformulación global en el paradigma intelectual para entender mejor el mundo que nos rodea, surgiendo formalmente el paradigma de sistemas.
1. LOS PROBLEMAS QUE HOY DERIVAN DE LAS SOLUCIONES DE AYER
Si intentamos analizar el problema no nos daremos cuenta que en muchas ocasiones éste es debido a algo que sucedió en el pasado pero que es posible que la repercusión de las decisiones que se tomaron, no recaigan sobre los que originaron el problema.
2. CUANTO MAS SE PRESIONA MAS SE PRESIONA EL SISTEMA
El Pensamiento sistémico tiene un nombre para este fenómeno “Realimentación Compensadora”. Ésta se da cuando las intervenciones bien intencionadas provocan respuestas del sistema que compensan los frutos de la intervención. Lo que provoca es que cuanto más esfuerzo realizamos para mejorar las cosas, más esfuerzo se requiere.
3. LA CONDUCTA MEJORA ANTES DE EMPEORAR
Las intervenciones de “bajo apalancamiento” resultan muy tentadoras al producir resultados en el corto plazo. La realimentación compensadora habitualmente implica una demora entre el beneficio a corto plazo y el perjuicio de largo plazo. La demora en un círculo explica por qué los problemas sistémicos son tan difíciles de reconocer. Una solución puede parecer muy acertada al hacer desaparecer los síntomas o mejorando la situación.
Con el paso de un par de meses o de años puede regresar o resurgir reforzado con lo que nos encontraremos con un problema mayor.
4. EL CAMINO FACIL LLEVA AL MISMO LUGAR
Si las soluciones fueran visibles u obvias para todos, tal vez ya la hubieran encontrado. En muchas ocasiones se insiste en soluciones conocidas mientras los problemas fundamentales persisten o se empeoran, éste es un buen indicador de un pensamiento asistémico.
LA CURA PUEDE SER PEOR QUE LA ENFERMEDAD
A veces la solución fácil o familiar no sólo es ineficaz, sino adictiva y peligrosa. La consecuencia de las mejoras a corto plazo conducen a una dependencia a largo plazo que los pensadores sistémicos denominan “el Desplazamiento de la Carga”.
5. LO MAS RAPIDO ES LO MAS LENTO
Los síntomas más obvios que indican la existencia de problemas no tienen por qué darse en el mismo espacio y tiempo que la causa. La raíz de las dificultades no se encuentra en agentes externos, sino en nosotros mismos. Hay mucha disparidad fundamental entre la naturaleza de la realidad de los sistemas complejos y los modos predominantes de pensar sobre esa realidad. El primer paso para corregir esa disparidad consiste en abandonar esta idea de que la causa y el efecto están próximos en el espacio y el tiempo.
6. LOS CAMBIOS PEQUEÑOS PUEDEN PRODUCIR RESULTADOS GRANDES, PERO LAS ZONAS DE MAYOR APALANCAMIENTO A MENUDO SON LAS MAS OBVIAS
El pensamiento sistémico también enseña que los actos pequeños y bien focalizados a veces producen mejoras significativas y duraderas, si se realizan en el sitio apropiado. Los pensadores sistémicos lo denominan “Principio de la Palanca”. Afrontar un problema difícil suele requerir ver donde se encuentra el punto de apalancamiento. Se realizaría un cambio con el mínimo esfuerzo que llevaría a una mejora significativa duradera. El problema es que las zonas de alto apalancamiento no son evidentes para la mayoría de los integrantes del sistema. No están próximas en el tiempo y el espacio respecto de los síntomas.
7. SE PUEDE ALCANZAR DOS METAS A LA VEZ
A veces los dilemas más enredados dejan de serlo cuando se ven desde la perspectiva sistémica. Son producto de un pensamiento por instantáneas y no por proceso, y se ve de manera diferente cuando se piensa en el cambio a través del tiempo. Muchos dilemas son producto del pensamiento estático.
8. DIVIDIR UN ELEFANTE POR LA MITAD NO GENERA DOS ELEFANTES PEQUEÑOS
La mayoría de los problemas administrativos requieren ver su totalidad que genera los problemas. Un problema donde no hay apalancamiento posible se debe a que no pueden ser examinados solo en parte sino en su totalidad.
9. NO HAY CULPA
Se suele culpar a las circunstancias externas de los problemas. El pensamiento sistémico muestra que no hay nada externo, sino que nosotros y la causa de nuestros problemas forman parte de un solo sistema.
Un ejemplo claro de las leyes del pensamiento sistemico se encunentra en la evolucion de sistemas operativos como Windows y Linux.